Sobre el Autor: Alejandro Bernaola es Gerente de Alianzas ACM Ventures y Socio fundador en Investa VB.
«El Ministerio de Agricultura hace un año decidió realizar un proceso de innovación abierta, aunque formalmente no lo llamaron así, en la práctica es lo que se ha hecho. Se convocaron empresas y emprendedores a que presenten y piloteen soluciones innovadoras para la agricultura familiar.»
En el Perú se viene llevando a cabo uno de los proyectos más novedosos e innovadores en el sector agrario de los últimos años, esta vez no se trata de obras de irrigación ni de costosos sistemas de extensión, sino que se trata de resolver la pregunta: ¿cómo hacemos para que los pequeños productores agrarios mejoren sus decisiones de producción y comercialización?
Se estima que existen más de 2.13 millones de unidades productivas llamadas “pequeña agricultura familiar”, muchas sumidas en pobreza y pobreza extrema, que enfrentan problemas como desorden en su producción, baja calidad de post cosecha, infraestructura vial inadecuada para conexión a mercados, presencia de un número alto de intermediarios, entre otros. Todos estos son factores que disminuyen permanentemente su rentabilidad y competitividad.
Frente a esto, junto con todas las actividades regulares que desempeña el Ministerio de Agricultura, hace un año decidieron realizar un proceso de innovación abierta, aunque formalmente no lo llamaron así, en la práctica es lo que se ha hecho. Se ha convocado a empresas y emprendedores a que presenten y piloteen soluciones para facilitar información para la toma de decisiones de los pequeños productores agrarios. Un abanico de soluciones tan amplio que va desde mejora de aspectos productivos, información de precios de venta, oportunidades de comercialización, costos de insumos y factores de producción, oportunidades de inversión, información agroclimática, plagas y enfermedades, gestión agrícola entre otros, hoy se encuentran trabajando de la mano de productores y el gobierno.
Lo interesante de este ejercicio es que muchos de los factores que afectan al pequeño productor, también son válidos para las grandes explotaciones agrarias. Si bien estas últimas son operaciones modernas que controlan bien variables como genética de semilla, eficiente fertilización y control fitosanitario, les es imposible controlar el stress abiótico (stresses ambientales como la sequía, salinidad, elevada iluminación y temperaturas extremas). Con lo cual, un productor moderno puede preguntarse de qué le sirvió gastar más dinero en una mejor semilla, si al final en el ciclo productivo enfrenta cambios drásticos de temperatura que hace que esa semilla no alcance todo su potencial productivo. Este hecho se configura como un mercado interesante de crecimiento para las soluciones que hoy se vienen piloteando.
Entre las soluciones que hoy se vienen piloteando se tiene: Proyecto PACHATEC de inQube LATAM que es un esfuerzo para crear una red troncal digital sin semáforo para la cadena de valor agrícola (http://www.inqube.biz/latam/), PEDRO El Datero de ACM Ventures que brinda información diaria de clima y precios de mercado a más de 22 mil usuarios (https://www.pedro.com.pe), Infoagro que provee información relevante para la toma de decisiones (https://www.infoagro.pe) y Walkie Talkie AGROS que funciona como central telefónica de asesorías técnicas, acceso a información relevante (clima, consultas, etc), y creación de la identidad digital del agricultor familiar (https://agros.tech). Estas son sólo cuatro de las más de diez soluciones que se vienen implementando a lo largo del Perú.
Si se afirma que la compra de The Climate Corporation por parte de Monsanto en el 2013 hizo que los inversionistas empiecen a ver el agtech como un destino de inversión relevante, tanto que hoy es uno de los principales destinos de inversión con casi 5 billones de dólares invertidos en startups en el 2019, lo mismo sucede con startups que ofrecen soluciones digitales para pequeños productores como el caso de Wefarm que opera en Kenya, Uganda y Tanzania con más de 2 millones de pequeños productores y ya ha recibido inversión de True Ventures, LocalGlobe y Accelerated Digital Ventures.
Así pues, no sería extraño que alguna de estas soluciones que hoy se pilotean a lo largo del Perú termine representándonos en uno de los FAC de los próximos años, lo que le permitirá acercar su propuesta a pequeños productores agrarios del mundo.
Se estima que existen más de 2.13 millones de unidades productivas llamadas “pequeña agricultura familiar”, muchas sumidas en pobreza y pobreza extrema, que enfrentan problemas como desorden en su producción, baja calidad de post cosecha, infraestructura vial inadecuada para conexión a mercados, presencia de un número alto de intermediarios, entre otros. Todos estos son factores que disminuyen permanentemente su rentabilidad y competitividad.
Frente a esto, junto con todas las actividades regulares que desempeña el Ministerio de Agricultura, hace un año decidieron realizar un proceso de innovación abierta, aunque formalmente no lo llamaron así, en la práctica es lo que se ha hecho. Se ha convocado a empresas y emprendedores a que presenten y piloteen soluciones para facilitar información para la toma de decisiones de los pequeños productores agrarios. Un abanico de soluciones tan amplio que va desde mejora de aspectos productivos, información de precios de venta, oportunidades de comercialización, costos de insumos y factores de producción, oportunidades de inversión, información agroclimática, plagas y enfermedades, gestión agrícola entre otros, hoy se encuentran trabajando de la mano de productores y el gobierno.
Lo interesante de este ejercicio es que muchos de los factores que afectan al pequeño productor, también son válidos para las grandes explotaciones agrarias. Si bien estas últimas son operaciones modernas que controlan bien variables como genética de semilla, eficiente fertilización y control fitosanitario, les es imposible controlar el stress abiótico (stresses ambientales como la sequía, salinidad, elevada iluminación y temperaturas extremas). Con lo cual, un productor moderno puede preguntarse de qué le sirvió gastar más dinero en una mejor semilla, si al final en el ciclo productivo enfrenta cambios drásticos de temperatura que hace que esa semilla no alcance todo su potencial productivo. Este hecho se configura como un mercado interesante de crecimiento para las soluciones que hoy se vienen piloteando.
Entre las soluciones que hoy se vienen piloteando se tiene: Proyecto PACHATEC de inQube LATAM que es un esfuerzo para crear una red troncal digital sin semáforo para la cadena de valor agrícola (http://www.inqube.biz/latam/), PEDRO El Datero de ACM Ventures que brinda información diaria de clima y precios de mercado a más de 22 mil usuarios (https://www.pedro.com.pe), Infoagro que provee información relevante para la toma de decisiones (https://www.infoagro.pe) y Walkie Talkie AGROS que funciona como central telefónica de asesorías técnicas, acceso a información relevante (clima, consultas, etc), y creación de la identidad digital del agricultor familiar (https://agros.tech). Estas son sólo cuatro de las más de diez soluciones que se vienen implementando a lo largo del Perú.
Si se afirma que la compra de The Climate Corporation por parte de Monsanto en el 2013 hizo que los inversionistas empiecen a ver el agtech como un destino de inversión relevante, tanto que hoy es uno de los principales destinos de inversión con casi 5 billones de dólares invertidos en startups en el 2019, lo mismo sucede con startups que ofrecen soluciones digitales para pequeños productores como el caso de Wefarm que opera en Kenya, Uganda y Tanzania con más de 2 millones de pequeños productores y ya ha recibido inversión de True Ventures, LocalGlobe y Accelerated Digital Ventures.
Así pues, no sería extraño que alguna de estas soluciones que hoy se pilotean a lo largo del Perú termine representándonos en uno de los FAC de los próximos años, lo que le permitirá acercar su propuesta a pequeños productores agrarios del mundo.