El rol de la Mujer en el Emprendimiento

Sobre la Autora: Debbie Vilcapoma es parte del Equipo Gestor en Hub Udep

«Si los inversionistas hubieran invertido la misma cantidad de capital en empresas dirigidas por mujeres, habrían generado US$85 millones adicionales en ingresos.»

De acuerdo a algunos reportes, podemos conocer que en los últimos años el impulso de los emprendimientos en general y de cómo están colocando a Perú en el mapa para atraer más inversionistas y poder convertirnos en uno de los próximos hubs de innovación y emprendimiento a nivel LATAM; sin embargo estas buenas noticias van acompañadas a la baja tasa de startups liderados por mujeres que reciben inversión de fuentes externas, podemos decir que los financiamientos no están llegando equitativamente.

El último reporte del BID Lab “Tecnolatinas 2021” nos muestra que sólo el 10% de startups en LAC (Latinoamérica y el Caribe), tienen al menos a una mujer como fundadora y esto es similar a Israel (9%); sin embargo el porcentaje está creciendo en Estados Unidos con un 22% y es buen factor que afecta a nivel global, además según el Banco Mundial en LATAM solo el 5% del capital de riesgo van destinados como inversión a las nuevas empresas con gran potencial de crecimiento lideradas por mujeres.

Según MassChallengue, en promedio, las mujeres, a pesar de recaudar menos dinero, generaban más ganancia por cada dólar recaudado, las nuevas empresas dirigidas por mujeres generaron 78 centavos en ingresos, en comparación con 31 centavos para los hombres. Por ello, si los inversionistas hubieran invertido la misma cantidad de capital en empresas dirigidas por mujeres que en las dirigidas por hombres, habrían ayudado a generar US $85 millones adicionales en ingresos.

¿Cómo creamos más apoyo al ecosistema emprendedor femenino?, para ello deberíamos enfocarnos en la educación, ya que es la base para potenciar la formación en emprendimiento desde edades tempranas; crear programas para promover el espíritu emprendedor como opción de trabajo y que no sólo se genera por necesidad, haciéndoles conocer las historias de éxito de muchas emprendedoras globales que están liderando varios sectores, no podría nombrar a todas las mujeres emprendedoras que conozco y respeto muchísimo, empezando con los emprendimiento de los diversos programas que tienen la incubadora Hub Udep, siendo una de ellas el programa WISE que forman emprendedoras en las líneas STEM (science, technology, engineering and mathematics), a través de capacitaciones, mentorías y visibilidad ante otros actores del ecosistema.

Debemos seguir trabajando para eliminar ciertas creencias sociales que afirman que la mujer tiene menor compromiso (postulan menos a las convocatorias), menor capacidad de obtener beneficios en los negocios, dificultad de aguantar la presión y gestionar sus emociones. Como conclusión, persisten estereotipos retrógrados que poco a poco hay que eliminar a través de la educación.

Otro factor a considerar es seguir creando redes de apoyo con mentores y conectores, aprovechar los programas de entrenamiento tanto privadas y públicas de incubadoras,  aceleradoras y entidades del gobierno. Actualmente existen fondos a nivel global que están invirtiendo en emprendimientos liderados por mujeres, uno de ellos es WeInvestLatam, comunidad de mujeres con poder de decisión en fondos de inversión, Family Offices y ángeles inversionistas.
Conozco de primera mano que ser emprendedor es cuestión de paciencia, perseverancia y tener como objetivo romper expectativas. Así como dice la frase “La unión hace la fuerza”, las mujeres empresarias tienen que estar juntas y compartir sus experiencias, logros, dificultades, éxitos etc., siempre habrá alguna persona que no pudo lograr algún objetivo y puedas compartir tu experiencia (Frase de GirlIn Corporation), siendo parte de una incubadora de negocios mi meta es seguir aportando a crear un ecosistema emprendedor más equilibrado, no sólo por cumplir una cuota de igualdad, ni por moda, va por los resultados en los negocios cualquiera sea el tamaño y convertirlo en emprendimientos más rentables.

Fondo soberano de riqueza, capital e innovación

Sobre el Autor: Pablo Secada, Economista y Candidato al Congreso por el PPC

“La mejor opción muy rara vez es adoptada como política pública. No la pierdan de vista, sin embargo. Puede ser adoptada parcialmente. Estén listos para cuando se presente la oportunidad.”

Me gustaría hacer dos propuestas, desde la perspectiva de las políticas públicas y las finanzas.
Los emprendedores necesitan contrapartes en el estado que tengan autonomía política, financiera y una disponibilidad de recursos significativamente superior. Esos tres objetivos se consiguen con un fondo soberano de riqueza (FSR).

Nuestro país tiene decenas de fondos y cuentas especiales del Tesoro que son FSR. Nuestra propuesta es consolidarlos gradualmente, en un solo fondo que sea autónomo constitucionalmente si es posible. Estimamos que los activos financieros del sector público no financiero, excluyendo el Fondo de Estabilización Fiscal, ascendieron a $25.7 mil millones el 2020. $16.2 mil millones y $4.2 mil millones, respectivamente, se ahorraron en depósitos a plazo y depósitos a la vista, respectivamente. El activo financiero del sector público no se ahorra en bancos. Ningún fondo soberano de riqueza del mundo hace tal cosa.

Estimamos que si se invirtieran esos recursos en un fondo soberano de riqueza administrado adecuadamente, se obtendrían ingresos de $774 millones anuales adicionales en promedio. Ustedes harían una revolución con una fracción.

En nuestro país personas naturales pueden financiar empresas. Fondos locales lo hacen desde $1 millón aproximadamente. Fondos internacionales, muy competitivos porque el costo del dinero es bajísimo y las valorizaciones de empresas son altas, cierran transacciones desde unos $10 millones.
El boom de los fondos ESG ha abierto una nueva alternativa de financiamiento, más a tono con el tamaño de las necesidades de financiamiento locales. Tienen que ser parte de esta revolución.

No les quiero vender ilusiones. El mercado de capitales (MK) local no es competitivo. Si pueden, busquen los fondos afuera. Necesitan gobierno corporativo, visión y experiencia, así sea en el directorio o de algún accionista. Distínganse de las típicas empresas familiares que están en el mismo sector por generaciones.

Tampoco lo quiero hacer con el FSR. La mejor opción muy rara vez es adoptada como política pública. No la pierdan de vista, sin embargo. Puede ser adoptada parcialmente. Estén listos para cuando se presente la oportunidad.

Futuro y expectativas post pandemia en el mercado de startups

Sobre el Autor: Renzo Salas es Finance Manager en Wayra Hispam, MBA e ingeniero industrial con experiencia en administración de empresas, innovación abierta en corporaciones e inversión en startups. 

«Esperemos que este año de transformación digital acelerado forzado sea el caldo de cultivo para identificar las startups de las que hablaremos en el futuro y serán los futuros casos de orgullo como lo son Fitco, Joinnus y Chazki, como ejemplo de varias otras que han realizado un trabajo espectacular este 2020 con resultados diversos, pero mostrando la calidad humana detrás siempre, que sin calidad humana no se tiene nada de lo que hemos hablado en este artículo.»

El año 2020 pasará a la historia de la humanidad y quedará grabado en la memoria de esta generación como el año en que el mundo cambió repentinamente, ya sea para bien o para mal, el cambio en nuestros estilos de vida ocurrió. Como foco de este artículo me gustaría llevarlos a reflexionar en el cambio de varias industrias. Además, pensar en las tendencias que, ya siendo fin de 2020, podemos avizorar quedarán para los próximos años relacionado a startups.
 
Esta situación de pandemia se dio globalmente y casi en simultáneo, con algunas semanas de desfase si queremos ser más estrictos entre regiones: primero Asia, luego Europa y América. En este sentido casi en paralelo todos los ciudadanos del mundo nos hemos visto en la necesidad de adaptar nuestro trabajo, nuestras actividades de ocio, nuestro consumo, en resumen, toda nuestra vida. La ventaja de la globalidad actual no solo jugó en favor de la expansión del virus que viajó en aviones, sino también de las personas, dado que la información viajó vía fibra óptica, y hoy en día contamos con herramientas como el internet, la programación y emprendedores tecnológicos que no tuvimos en la última gran pandemia de 1918.
Desde Wayra Hispam, nos dedicamos a buscar startups tecnológicas que aporten valor a la transformación digital de empresas e individuos en diferentes países del mundo, con enfoque de alcance global y fomentando que grandes corporaciones incorporen la innovación abierta a sus procesos tradicionales. 
 
Yendo directamente al foco relacionado a startups, esta pandemia fue prueba de fuego para muchos emprendimientos digitales que sirvieron para mostrar nuevas posibilidades y ayudar a empresas tradicionales a sobrevivir. Y me gustaría compartir el caso de 3 empresas del portafolio de Wayra durante la pandemia.
 
Primero tenemos el caso de Fitco, startup dedicada a proveer su sistema de gestión a gimnasios, clubes deportivos y centros fitness, la cual fomentó nuevas formas de monetización e ingresos para sus clientes. Pongámonos en los zapatos de un gimnasio, cuando recién se está en la última fase de reactivación, y se está considerando la reapertura de gimnasios. Son más de 8 meses a puertas cerradas donde ningún bono, ni préstamo, ni eficiencia en gastos soportaría estar sin operar. A través del servicio Fitco Live, los gimnasios son capaces de montar una plataforma digital con contenido propio para brindar clases online y en vivo a través del dispositivo que el cliente prefiera. Si bien estos ingresos no reemplazan inmediatamente los ingresos tradicionales de suscripción y operación física, sí que son bien recibidos y, además, significa mantener cubierta la necesidad de ejercitarse de los usuarios (la cual no desaparece con la pandemia, solo se transforma en la forma). Esta nueva línea de ingresos no desaparecerá con la reapertura de gimnasios, se complementará formando una línea de negocio por seguir desarrollando.
 
Caso similar, de una empresa que permitió seguir monetizando a sus clientes es Joinnus, plataforma para gestionar eventos y vender entradas online. Con las restricciones de eventos masivos, se han enfocado en ofrecer su plataforma y tecnología para fomentar eventos online, talleres, contenido y tienda virtuales a todos los creadores de contenido que antes ofrecían entradas en esta plataforma para llenar conciertos, teatros y estadios. Igual que el caso anterior, esta nueva línea de negocio quedará a futuro junto con las actividades de concurrencia masiva cuando se vuelvan a habilitar, dando mayores opciones y posibilidades a los consumidores de eventos por cuál canal disfrutar de los eventos que toda ciudad tiene para ofrecerte.  
 
Lo que se puede rescatar de emprendedores como los de estos dos ejemplos previos; es la capacidad de respuesta, de transformación y de ejecución. Aspectos que los inversionistas evalúan al momento de invertir en startups. Y es que la inversión en etapas tempranas está más enfocada en el potencial del equipo fundador que en el producto inicial. Somos testigos de primera línea que el producto o servicio de un momento a otro cambia. Pensemos cómo cada uno como usuario o consumidor ha cambiado sus hábitos regulares.   
 
Otro cambio que vivimos muy de cerca es el boom de los servicios delivery para compra de todo tipo de bienes. Los grandes retailers y supermercados que ya venían teniendo un canal online incipiente desde antes de la pandemia vieron como sus servicios se veían desbordados de pedidos por un canal que venía en ligero crecimiento y explotó de una semana a otra. Es ahí donde una startup como Chazki ha desplegado su capacidad de soluciones logísticas usando tecnología para ser más eficientes que operadores logísticos tradicionales, aliviando un dolor de cabeza para el sector retail y apoyando a los e-commerce a cumplir con todos los pedidos; significando esto, un crecimiento exponencial en ingresos para las empresas del sector logístico. El enfoque de Chazki es regional operando en México, Perú, Chile y Argentina; ha sabido hacer un mix de ingresos interesante acompañando a los actores regionales de retail en sus principales mercados.
 
Otro foco que se evalúa en la startups es la capacidad de internacionalización, no solo por el hecho de crecer geográficamente y en cantidad de clientes, que es súper relevante, sino por los beneficios que trae consigo ello. Diversificar el riesgo entre varios mercados eliminando la dependencia de un solo mercado. Acompañando a clientes masivos en los países donde opere como herramienta de fidelización y asegurar ingreso recurrente. Finalmente da prueba tangible que la solución está más que probada y con posibilidad de seguir creciendo para atraer inversionistas a rondas serie A o serie B y conseguir potenciales exits (ventas de participación) con retornos interesantes para los inversionistas de rondas semilla. A más casos de éxito de startups que entreguen retorno, el mercado de Venture Capital o Inversión de Riesgo en startups será más conocido y tendrá más recursos a disposición localmente en Perú, pues a nivel regional se encuentran más desarrollados y con casos de éxitos más conocidos.  
 
La pandemia como hemos visto en estos casos puntuales ha significado un reto muy difícil, a lo mejor el más difícil en la vida y operación de muchos sectores. Y si globalmente se habla de Zoom y su valor como compañía como herramienta predilecta para conectar personas en cuarentena, felizmente tenemos casos peruanos de startups que no solo han sido creativos en la generación de nuevas líneas ingresos, sino que han permitido brindar solución a sectores y empresas que se hubieran visto superadas por la pandemia.
 
Dicen que el emprender no es fácil, que hay varias maneras más fáciles de hacerse millonario. Y esto aplica tanto para emprendedor como inversionista en Venture Capital. Una startup nace, crece y explota comercialmente no solo impulsado por el afán económico, sino por el afán primordial de buscar satisfacer una necesidad y atender un problema no atendido. Durante este año de pandemia las nuevas reglas de juego generaron incertidumbre y necesidad de cambio, felizmente contamos con emprendedores con actitud y capacidad de ejecución que han sabido encontrar modos de satisfacerlas.
 
Como conclusión, una de las principales perspectivas que rescato es que las nuevas líneas de negocio que se han probado en esta etapa llegaron para quedarse y convivirán con los modelos de negocio que existían pre-covid complementándose en una rica oferta a los clientes que son los máximos beneficiados. La segunda es que esta generación de emprendedores que vivió este momento de cambio tan radical inspirará a una nueva generación de emprendedores, los cuales hoy en día podrían estar dentro de los equipos de estas startups como desarrolladores, como responsables de marketing o ventas; que ya saben cómo se gestiona una startup en la etapa de máxima presión como son las crisis. También podríamos tener futuros emprendedores en los usuarios que han vivido el año más digital y disruptivo de la historia, los cuales podrán identificar nuevas necesidades que irán surgiendo. Y finalmente si hablamos de startups hablamos de inversionistas que van de la mano, creciendo juntos y esperemos que este año de transformación digital acelerado forzado sea el caldo de cultivo para identificar las startups de las que hablaremos en el futuro y serán los futuros casos de orgullo como lo son Fitco, Joinnus y Chazki, como ejemplo de varias otras que han realizado un trabajo espectacular este 2020 con resultados diversos, pero mostrando la calidad humana detrás siempre, que sin calidad humana no se tiene nada de lo que hemos hablado en este artículo.   

La Gig Economy y el futuro del trabajo, hoy en Latinoamérica

Sobre el Autor: Luis Eduardo Augusto es Emprendedor, gestor cultural y experto e en industrias creativas. Fundador de Arte Manifiesto una red social de portafolios en línea para artistas visuales y creadores de la región, una comunidad de más de 8000 miembros en Perú y Latinoamérica, proyecto ganador de Wayra Perú 2012, StartUp Perú 2014 y la Creative Business Cup 2017.
A través del proyecto de Arte Manifiesto conocí miles de artistas, diseñadores y desarrolladores, y otro ciento de casos de éxito de emprendimientos creativos.

Los creadores son personas que valoran su libertad por sobre todas las cosas, y eso significa que muchas veces no quieren trabajar en una oficina regular, o acaso les resulta más rentable trabajar por su cuenta.

Eso significa que si quieres hacer lo que amas, lo más conveniente es convertirte en un emprendedor freelance.
 
Y es que si te das cuenta, los creadores freelance son la mínima expresión de emprendimiento: empresas en donde el trabajador, la marca y la empresa son la misma persona.

Además, los emprendedores freelance casi siempre tienen los siguientes puntos en común:

– No tienen un jefe, pero tienen varios clientes.
– No tienen horarios, pero tienen deadlines.
– No tienen necesidad de ir a una oficina, trabajan desde casa, taller o workstation.
– Manejan su marca personal utilizando las redes sociales.
– Su labor está orientada a piezas, es decir a entregables.

¿Te parece Familiar?
Pues es que el COVID 19 nos convirtió, de la noche a la mañana, en Freelancers a todos.

Trabajar desde casa es una tecnología del futuro, hoy.

Tener que migrar de emergencia a una “Touchless Economy”, cómo lo indicaba en un artículo anterior, cambió de facto todas las reglas de juego, las mismas que seguirán cambiando, inexorablemente.
 
Por ejemplo:
Si eres trabajador de planilla, y aún mantienes tu empleo, lo más probable es que estés trabajando desde casa mientras lees este artículo.

Durante este tiempo, has aprendido a separar a los niños del espacio de trabajo, a silenciar el audio / video como un ninja y, lo más probable, es que te hayas vuelto mucho más eficiente que cuando invertías de 2 a 3 horas diarias sólo en movilizarte.

Tener esas 3 horas diarias te abren un abanico de oportunidades, pues te permite cumplir con tus actividad principal y poder generar diferentes ingresos adicionales con  un emprendimiento paralelo o “side hustle”.

Si, por el contrario, has sido afectado por el impacto disruptivo del COVID, probablemente en este momento estás buscando oportunidades para generar ingresos.

Es en este escenario, que nos compete a todos entender la revolución del trabajo que se está desarrollando frente a nuestros ojos, así como la inminente explosión de la Gig Economy.

Entonces, ¿Qué es la Gig Economy?

La Gig Economy se traduce como la economía de bolo, jerga entre músicos y productores de eventos determinada para el pago por la presentación de una banda en un concierto o festival.


Se trata de una economía por encargo o por demanda. O, mejor dicho, la economía del “Freelance” o “Freelo”. En la Gig Economy el trabajo es temporal, es flexible y permite a las empresas contratar freelancers e independientes en vez de trabajadores a tiempo completo.

Contratar freelancers ha sido siempre una forma efectiva, rápida y económica de hacer crecer pequeños y medianos negocios. Pero ahora, con el auge de la llamada Gig Economy, el talento independiente está volviéndose cada día una apuesta más popular entre grandes empresas.

La Gig Economy se conoce principalmente por modelos y startups de servicios de infraestructura y de poca especialización cómo:
– Conductores de Uber/Lyft
– Rappi tenderos
– Vendedores en marketplace
– Operadores de Call Center

Pero lo cierto es que existen cada vez más miembros de la Gig Economy altamente especializados, y una fuerza laboral mejor distribuida de trabajadores autónomos que ofrecen sus servicios para escalar emprendimientos y competir por un mercado global.

Por ejemplo, un estudio de Workana, una de las mas grandes plataformas de la Gig Economy en Latinoamérica, revela lo siguiente: las habilidades especializadas más demandadas en los profesionales freelancers de la GIG Economy son:

1. Tecnologías de la información
2. Marketing
3. Diseño
4. Ingeniería
5. Investigación
6. Desarrollo y consultoría estratégica

Sin embargo, la demanda en áreas administrativas, legales y de salud (entre otras), también está creciendo de forma exponencial.

A esta masa enorme de profesionales, se les denominado “Human Cloud” y es el sector de más rápido crecimiento de la Gig Economy.

La “human cloud” es un conjunto emergente de los mercados laborales en línea / digitales, donde el talento y los que buscan contratar talento puede encontrarse e involucrarse en un esquema de trabajo usualmente amplificado por una plataforma.

Números de la Gig Economy en USA y el mundo

Aquí algunos de los datos más relevantes del estudio de Kelly Services respecto al estado actual de las estadísticas de la Gig Economy en Estados Unidos.

– 57.3 millones de personas en Estados Unidos hacen freelance, y para el 2027 serán 86.5 millones, según un estudio de Upwork.
– Para el 44% de los trabajadores de la Gig Economy, estas actividades son su fuente principal de ingresos (Edison Research)
– 36% de trabajadores en Estados Unidos, participan en la Gig Economy, a través de su actividad principal o secundaria.(Gallup)
– Casi un tercio de la fuerza laboral en el mundo (31%) prefiere la flexibilidad y libertad del trabajo independiente.
– Los micronegocios de los freelancers independientes constituyen hasta el 17% del producto interno bruto de los Estados Unidos, llegando a generar hasta 2.4 trillones de dólares.
– Las plataformas y aplicaciones de Human Cloud generan cerca de treinta billones de dólares anuales en ganancias. (SIA)

Puedes encontrar muchas más en el siguiente artículo.

Tendencias en Latam durante el COVID19

Si bien aún no tenemos cifras oficiales en Latam, la pandemia claramente ha generado un enorme crecimiento en tráfico respecto al tema.
Segun el artículo de Entrepreneur: Aumenta 42% el número de freelancers en América Latina durante la pandemia: Workana
Para la plataforma Workana, el índice de registros ha alcanzado niveles históricos; en abril se registraron más de 100,000 nuevos trabajadores independientes en Latinoamérica, superando el promedio de registros del primer bimestre de 2020 en 42%. Por otro lado, abril de 2020 se convierte en el periodo de mayor cantidad de registros para la empresa fundada en 2012.

Durante la pandemia, Workana alcanzó la cifra de 3.2 millones de freelancers registrados en América Latina. En el caso de México, el crecimiento neto fue de 12%, y el marketplace superó los 220 mil freelancers durante este periodo. El indicador mensual de registros también se ubicó en niveles históricos en el país azteca, al crecer en abril un 77% respecto al promedio de registros nuevos previo a la crisis de la Covid-19.
“Vemos que uno de los impulsores de este crecimiento es la gran cantidad de personas trabajando desde casa que hay en este momento. Algunos profesionales están probando el trabajo freelance para monetizar su tiempo libre, mientras otros lamentablemente están en búsqueda de nuevas oportunidades laborales ante los recortes de personal”, dice Guillermo Bracciaforte, cofundador de Workana.

Conclusión

Cómo vemos, la Gig Economy especializada es una vacuna contra la dura recesión que esta en ciernes, y la tecnología del trabajo remoto hace que esta sea un tema del presente y ya no solo del futuro.

Existen muchas oportunidades y también muchos retos alrededor: como la seguridad social, los fondos de pensión y fintechs para necesidades específicas del sector.

En mi siguiente artículo cubriré 3 historias de Peruanos que están trabajando en la Gig Economy y sobre las plataformas. Pero puedes leer entre tanto mi artículo anterior sobre https://www.linkedin.com/pulse/la-economía-touchless-el-antídoto-digital-ante-corona-augusto/.

Ya hay miles de Freelancers provechando la Gig Economy y tu también puedes ser parte de ella.

Soluciones en América Latina, una región llena de talento (Parte I)

Sobre la Autora: Lucía Cristina Villavicencio, tiene un Maestría en Religión, Ética y Política de la Universidad de Harvard. Ha trabajado como consultora para Organizaciones No Gubernamentales y empresas privadas en temas de género, poblaciones LGBTIQ+, poblaciones migrantes y en situación de refugio e innovación. Actualmente, Lucía se desempeña como Consultora en Innovación en IMPAQTO y Storyhunter para Duolingo Spanish Podcast. A través de sus actividades Lucía explora cómo nuestras diferentes identidades, narrativas sociales y storytelling nos permiten innovar, ser motores de transformación social y digital y agentes de cambio a través del emprendimiento social, el intraemprendimiento y la gestión cultural. Su principal motor es construir un mundo inclusivo y justo.

«Hay millones de personas en Latinoamérica desesperados por construir una región más justa, más equitativa, más inclusiva. Una región que asegure la seguridad física, mental y psicológica de todes quienes la habitamos.»

América Latina se convertido en el epicentro de la pandemia del COVID-19. Los retos que enfrentábamos antes de la pandemia solo se han agudizado, evidenciando el largo camino que tenemos por recorrer para asegurar el bienestar de nuestres ciudadanes. Sin embargo, la voluntad, creatividad, fuerza y ganas de transformar de las personas que habitan América Latina se ha evidenciado cada vez que IMPAQTO llama a una convocatoria para buscar soluciones a los retos que enfrentamos como región.
 
IMPAQTO es una Empresa B basada en Ecuador, un «ecosystem builder» que acoge y apoya a agentes de cambio (emprendedores, freelancers, PYMES, corporativos e intraemprendedores) para convertir sus ideas en empresas y/o modelos escalables y de triple impacto. Esto lo hacemos a través de 3 unidades de negocio: 1) Coworking y Comunidad Virtual: Espacios colaborativos para agentes de cambio, 2) Lab: Aceleradora que acompaña a compañías escalables de impacto social o ambiental, 3) Consulting: Consultorías para apoyar a empresas y organizaciones internacionales a generar innovación con impacto.
 
Al llegar la pandemia, al igual que muchas empresas, tuvimos que empezar a transformarnos a evolucionar. Fue así como empezamos a trasladar nuestra comunidad de agentes de cambio de lo físico a lo digital. Empezamos por nuestros espacios. En Ecuador IMPAQTO tiene 5 sedes en las que diferentes tipos de emprendedores crean redes de contactos y desarrollan sus actividades. Al cerrar los espacios físicos abrimos los canales virtuales. Empezamos a dar webinars (charlas virtuales) todos los días. Invitamos a expertos en diferentes áreas como liderazgo en tiempos de crisis, teletrabajo, transformación digital, estrategia en tiempos complejos, eventos en línea, formas de pago en línea entre otros para satisfacer las necesidades que ahora tenían nuestros emprendedores. Por tres meses realizamos dos webinars diarios con una participación promedio de 200 personas por webinar.
 
Identificamos que a pesar del miedo y las restricciones las personas querían aprender, adaptarse, trabajar construir. Empezamos a pensar en cómo más podíamos contribuir. Entendíamos que la pandemia estaba afectado directamente a PYMES y emprendimientos de América Latina. Con el apoyo del BID Lab desarrollamos lo webinars, pero necesitábamos hacer más. Con el apoyo del BID Lab iniciamos un proyecto de mentorías para emprendimientos en las áreas más afectadas por el confinamiento como el turismo, la gastronomía, el calzado. Fue así como nació IMPAQTO Lab Mentorías un programa que unía a emprendedores con diferentes mentores, empresarios ecuatorianos, con el objetivo de entender que transformaciones o pasos inmediatos debía tomar cada emprendimiento para sobrevivir o transformar su modelo de negocio. Graduamos a 27 emprendimientos de este programa.
 
No era suficiente. Cada día veíamos con preocupación como las denuncias por violencia de género aumentaban en la región. Los casos de violencia física, psicológica y sexual en hogares incrementan durante la pandemia ya que el tiempo que las mujeres y niñas están solas con sus abusadores es mayor, las posibilidades de buscar ayuda se ven reducidas y los niveles de estrés y ansiedad aumentan. En la región al menos una de cada cuatro mujeres ha experimentado un episodio de violencia física, sexual o psicológica infligida por su pareja. Tanto solo en Ecuador, desde el inicio de la cuarentena se registraron 6,800 llamadas al 911 por posibles casos de violencia de género. Teníamos que actuar.
 
Daniela Peralvo, co-fundadora de IMPAQTO y Directora de IMPAQTO Labs, empezó a ver una tendencia en diferentes regiones del mundo e identificó que las hackatones, eventos de varios antes utilizados con el objetivo de desarrollar código, podrían ser una buena herramienta para encontrar soluciones a los retos que se agudizaban. Empezamos a hablar con nuestras contrapartes Planned Parenthood Global respondió, el BID Lab, UNICEF, el PNUD, la cooperación alemana a través de la GIZ. Organizamos nuestra primera hackatón virtual. Un evento de dos días en el que voluntuari@s virtuales de toda la región latinoamericana trabajarían con una metodología diseñada por IMPAQTO para encontrar soluciones a tres retos que millones de mujeres y niñas en nuestra región enfrentan todos los días y que a causa del COVID-19 se veían agudizados.
 
Los tres retos fueron: 1) Aumento en casos de violencia intrafamiliar bajo encierro, 2) Falta de acceso a productos y servicios, 3) Imposibilidad de comunicación con el exterior. Teníamos los retos definidos ahora teníamos que armar la hackatón. Para los que no son parte del mundo desarrollo digital o innovación abierta la palabra hackatón viene de la palabra hack (en inglés): solución creativa e innovadora para los problemas, con un enfoque con un enfoque lúdico. Y la palabra maratón que hace relación al tiempo de 24 a 48 hrs de trabajo que toma el trabajar retos planteados sobre un tema específico y presentar solucione innovadoras. Eso quiere decir que teníamos que armar un evento virtual de dos días que invite a sus participantes a generar soluciones y que l@s mantenga activos. El primer desafío fue entender la tecnología, pero gracias a nuestra Directora en Comunicación, María Angélica Arias, entendimos como podíamos hacer de una hackatón virtual una realidad.
 
El segundo reto era encontrar a los participantes. ¿Quién iba a querer estar conectado dos días enteros, trabajar intensamente y sin parar? Fue la mejor sorpresa. Ciento de personas en toda Latinoamérica quería trabajar por encontrar soluciones a los retos que enfrentan millones de niñas y mujeres en nuestra región. Recibimos más de 200 aplicaciones de más de 20 países (porque además personas que hablan español y viven fuera de Latinoamérica también querían sumarse). Tuvimos participantes de Brasil que hablaban portuñol, una mezcla de portugués y español, pero ellas querían participar, contribuir, ser parte de las soluciones.
 
Fue el mejor llamado a la realidad. El realizar esa primera hackatón “Hackea la Crisis 2020: Mujeres y Niñas” nos hizo darnos cuenta que hay millones de personas en Latinoamérica desesperados por construir una región más justa, más equitativa, más inclusiva. Una región que asegure la seguridad física, mental y psicológica de todes quienes la habitamos. Nuestros aliados, nuestros media partners como Investa VB en Perú, nos permitieron llegar a todas estas personas en diferentes países de nuestra región que querían actuar y generar soluciones.
 
Los resultados de la hackatón fueron excepcionales. Recibimos más de 200 aplicaciones de 20 países, generamos 27 soluciones, contamos con la participación de 78 personas como mentores, speakers, jurados, expertos y finalmente seleccionamos 3 soluciones que como premio recibieron capacitaciones en línea, apoyo económico para desarrollar el piloto de su solución y conexiones con distintas organizaciones que se comprometieron a impulsar el desarrollo de las soluciones.

Siguiente parte del artículo: Aquí!

Una visión global de las industrias creativas y culturales para América Latina

Sobre el autor:
Diego Jaén es actualmente Global Network Manager en Creative Business Network. Tiene experiencia en el desarrollo de programas de emprendimiento a nivel Centroamericano, Latinoamericano, multirregional y mundial. Ha trabajado con proyectos de cooperación y con fondos gubernamentales enfocados en el desarrollo de los sectores de las industrias creativas y culturales desde hace 5 años. Y tiene más de 8 años de experiencia en el desarrollo de programas educativos para emprendedores, competencias de emprendimiento y uso de herramientas de validación de modelos de negocio.

«Merecemos preguntarnos ¿qué sucede en América Latina?, ¿cómo podemos promover la cooperación interregional de los distintos ecosistemas emprendedores de la región?»

Al hablar de industrias creativas existen distintos enfoques, cada organización decide cuál es el que desea adoptar en función de sus necesidades, planes y programas. Desde el punto de vista de Creative Business Network (CBN) y en un contexto europeo, rodeado de oportunidades de financiamiento con proyectos de cooperación regional, las industrias creativas se dividen en 15 sectores[1]. Cualquier emprendimiento que sea parte de estos sectores, o que tenga una incidencia directa en el desarrollo de una empresa relacionada con ellos, se considera parte de las industrias creativas y culturales.

Por esta razón, al trabajar con un enfoque internacional desde Copenhague, en Creative Business Network se promueve una visión integral de las industrias creativas con el apoyo de sus aliados internacionales. Esto se traduce en uno de sus más grandes valores: el apoyo a la diversidad para la colaboración.

Es precisamente con este tipo de interacciones globales en mente, que abordo una temática relacionada con la cooperación interregional. Por lo que merecemos preguntarnos ¿qué sucede en América Latina?, ¿cómo podemos promover la cooperación interregional de los distintos ecosistemas emprendedores de la región?

En mi posición de Global Network Manager, y como Latinoamericano, considero que la cooperación entre ecosistemas es clave para el desarrollo de las industrias creativas y culturales en la región. La disposición para colaborar está presente en múltiples comunidades. De la misma manera, existe en varios espacios gubernamentales y diplomáticos. Sin embargo, es nuestro deber como organizaciones del ecosistema emprendedor encontrar más oportunidades para desarrollar nuestras capacidades, compartir y adquirir conocimiento en función de las necesidades de la industria.

Gracias a la oportunidad de experimentar de primera mano un proyecto de cooperación interregional europea, pude comprender la importancia de reconocer las fortalezas de organizaciones en otros países. Asimismo, descubrí el aporte de sumar redes de contactos en el desarrollo de proyectos para las startups de las industrias creativas y culturales. Cuando se suman experiencias desde varios países, con diferencias culturales, y con distintas estructuras de apoyo, se obtienen productos con riqueza de perspectivas que aseguran un enfoque integral.

Ahora bien, ¿a qué obstáculos nos enfrentamos en América Latina? Existen distintos factores que inciden directamente en el desarrollo de las industrias económicas. Mi objetivo no es apuntar ni condenar actitudes políticas o decisiones económicas. Al contrario, deseo celebrar estos factores y promover la diversidad de realidades que enfrentamos para encontrar, en conjunto, soluciones integrales que puedan ayudar a un gran número de emprendedores dentro de la industria.

Otro obstáculo es la tendencia a trabajar únicamente con los países vecinos. Es comprensible que la situación geográfica brinde una mayor similitud de las industrias económicas. No obstante, las industrias creativas y culturales poseen una capacidad mayor para internacionalizarse y adaptar sus productos y servicios a cada región o país. Por lo que el alcance de estos proyectos puede devenir en resultados que dejan de lado factores claves para el desarrollo de oportunidades de las startups.
  
Finalmente, para responder puntualmente a la pregunta inicial de cómo promover la cooperación de ecosistemas en la región, deseo afirmar que el aporte más significativo es reunir la mayor variedad de experiencias. Como organizaciones, debemos formar parte de diversas comunidades y representarlas en las distintas redes que ya conformamos. Necesitamos aprender el uno del otro y escuchar activamente los aportes y vivencias de las partes involucradas.

Este es solo uno de los primeros pasos, y estoy seguro de que, como región, estamos listos para darlo.
 
 
[1] Arquitectura, publicidad, artesanía y artesanía, diseño, tecnologías de la experiencia, moda, cine, video y fotografía, gastronomía, ocio, actividades, música, artes escénicas, publicación, radio y televisión, videojuegos y publicación electrónica (para industrias creativas), impresora 3d, juguetes y juegos.