Sobre la Autora: Debbie Vilcapoma es parte del Equipo Gestor en Hub Udep
«Si los inversionistas hubieran invertido la misma cantidad de capital en empresas dirigidas por mujeres, habrían generado US$85 millones adicionales en ingresos.»
De acuerdo a algunos reportes, podemos conocer que en los últimos años el impulso de los emprendimientos en general y de cómo están colocando a Perú en el mapa para atraer más inversionistas y poder convertirnos en uno de los próximos hubs de innovación y emprendimiento a nivel LATAM; sin embargo estas buenas noticias van acompañadas a la baja tasa de startups liderados por mujeres que reciben inversión de fuentes externas, podemos decir que los financiamientos no están llegando equitativamente.
El último reporte del BID Lab “Tecnolatinas 2021” nos muestra que sólo el 10% de startups en LAC (Latinoamérica y el Caribe), tienen al menos a una mujer como fundadora y esto es similar a Israel (9%); sin embargo el porcentaje está creciendo en Estados Unidos con un 22% y es buen factor que afecta a nivel global, además según el Banco Mundial en LATAM solo el 5% del capital de riesgo van destinados como inversión a las nuevas empresas con gran potencial de crecimiento lideradas por mujeres.
Según MassChallengue, en promedio, las mujeres, a pesar de recaudar menos dinero, generaban más ganancia por cada dólar recaudado, las nuevas empresas dirigidas por mujeres generaron 78 centavos en ingresos, en comparación con 31 centavos para los hombres. Por ello, si los inversionistas hubieran invertido la misma cantidad de capital en empresas dirigidas por mujeres que en las dirigidas por hombres, habrían ayudado a generar US $85 millones adicionales en ingresos.
¿Cómo creamos más apoyo al ecosistema emprendedor femenino?, para ello deberíamos enfocarnos en la educación, ya que es la base para potenciar la formación en emprendimiento desde edades tempranas; crear programas para promover el espíritu emprendedor como opción de trabajo y que no sólo se genera por necesidad, haciéndoles conocer las historias de éxito de muchas emprendedoras globales que están liderando varios sectores, no podría nombrar a todas las mujeres emprendedoras que conozco y respeto muchísimo, empezando con los emprendimiento de los diversos programas que tienen la incubadora Hub Udep, siendo una de ellas el programa WISE que forman emprendedoras en las líneas STEM (science, technology, engineering and mathematics), a través de capacitaciones, mentorías y visibilidad ante otros actores del ecosistema.
Debemos seguir trabajando para eliminar ciertas creencias sociales que afirman que la mujer tiene menor compromiso (postulan menos a las convocatorias), menor capacidad de obtener beneficios en los negocios, dificultad de aguantar la presión y gestionar sus emociones. Como conclusión, persisten estereotipos retrógrados que poco a poco hay que eliminar a través de la educación.
Otro factor a considerar es seguir creando redes de apoyo con mentores y conectores, aprovechar los programas de entrenamiento tanto privadas y públicas de incubadoras, aceleradoras y entidades del gobierno. Actualmente existen fondos a nivel global que están invirtiendo en emprendimientos liderados por mujeres, uno de ellos es WeInvestLatam, comunidad de mujeres con poder de decisión en fondos de inversión, Family Offices y ángeles inversionistas.
Conozco de primera mano que ser emprendedor es cuestión de paciencia, perseverancia y tener como objetivo romper expectativas. Así como dice la frase “La unión hace la fuerza”, las mujeres empresarias tienen que estar juntas y compartir sus experiencias, logros, dificultades, éxitos etc., siempre habrá alguna persona que no pudo lograr algún objetivo y puedas compartir tu experiencia (Frase de GirlIn Corporation), siendo parte de una incubadora de negocios mi meta es seguir aportando a crear un ecosistema emprendedor más equilibrado, no sólo por cumplir una cuota de igualdad, ni por moda, va por los resultados en los negocios cualquiera sea el tamaño y convertirlo en emprendimientos más rentables.
El último reporte del BID Lab “Tecnolatinas 2021” nos muestra que sólo el 10% de startups en LAC (Latinoamérica y el Caribe), tienen al menos a una mujer como fundadora y esto es similar a Israel (9%); sin embargo el porcentaje está creciendo en Estados Unidos con un 22% y es buen factor que afecta a nivel global, además según el Banco Mundial en LATAM solo el 5% del capital de riesgo van destinados como inversión a las nuevas empresas con gran potencial de crecimiento lideradas por mujeres.
Según MassChallengue, en promedio, las mujeres, a pesar de recaudar menos dinero, generaban más ganancia por cada dólar recaudado, las nuevas empresas dirigidas por mujeres generaron 78 centavos en ingresos, en comparación con 31 centavos para los hombres. Por ello, si los inversionistas hubieran invertido la misma cantidad de capital en empresas dirigidas por mujeres que en las dirigidas por hombres, habrían ayudado a generar US $85 millones adicionales en ingresos.
¿Cómo creamos más apoyo al ecosistema emprendedor femenino?, para ello deberíamos enfocarnos en la educación, ya que es la base para potenciar la formación en emprendimiento desde edades tempranas; crear programas para promover el espíritu emprendedor como opción de trabajo y que no sólo se genera por necesidad, haciéndoles conocer las historias de éxito de muchas emprendedoras globales que están liderando varios sectores, no podría nombrar a todas las mujeres emprendedoras que conozco y respeto muchísimo, empezando con los emprendimiento de los diversos programas que tienen la incubadora Hub Udep, siendo una de ellas el programa WISE que forman emprendedoras en las líneas STEM (science, technology, engineering and mathematics), a través de capacitaciones, mentorías y visibilidad ante otros actores del ecosistema.
Debemos seguir trabajando para eliminar ciertas creencias sociales que afirman que la mujer tiene menor compromiso (postulan menos a las convocatorias), menor capacidad de obtener beneficios en los negocios, dificultad de aguantar la presión y gestionar sus emociones. Como conclusión, persisten estereotipos retrógrados que poco a poco hay que eliminar a través de la educación.
Otro factor a considerar es seguir creando redes de apoyo con mentores y conectores, aprovechar los programas de entrenamiento tanto privadas y públicas de incubadoras, aceleradoras y entidades del gobierno. Actualmente existen fondos a nivel global que están invirtiendo en emprendimientos liderados por mujeres, uno de ellos es WeInvestLatam, comunidad de mujeres con poder de decisión en fondos de inversión, Family Offices y ángeles inversionistas.
Conozco de primera mano que ser emprendedor es cuestión de paciencia, perseverancia y tener como objetivo romper expectativas. Así como dice la frase “La unión hace la fuerza”, las mujeres empresarias tienen que estar juntas y compartir sus experiencias, logros, dificultades, éxitos etc., siempre habrá alguna persona que no pudo lograr algún objetivo y puedas compartir tu experiencia (Frase de GirlIn Corporation), siendo parte de una incubadora de negocios mi meta es seguir aportando a crear un ecosistema emprendedor más equilibrado, no sólo por cumplir una cuota de igualdad, ni por moda, va por los resultados en los negocios cualquiera sea el tamaño y convertirlo en emprendimientos más rentables.